La simple vista de la penitenciería Alcatraz ya impone respeto.
Pasear por sus estancias te hace pensar que aún sigue en funcionamiento.
Resulta difícil ponerse en el lugar de los presos que vivían aquí.
Este es el lugar de recreo que tenían y donde algunos aprovechaban para hacer sus negocios.
Las pequeñas celdas guardan un halo de misterio inquietante...
Recordad que en estos sitios... siempre hay alguien vigilándote.